Ejemplar de Galeodea Rugosa
Arrastrada en las redes de los barcos pesqueros, esta caracola no se resigna a convertirse en una concha mas de las muchas existentes en las dársenas del puerto; está empeñada en sobrevivir. Jamás llegará a su sitio de origen, pero al menos, seguirá filtrando el agua de nuestras queridas costas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario